Como ocurre con todos los tipos de cáncer, la detección temprana y la prevención son cruciales para reducir el el riesgo de cáncer de tiroides y diagnosticarlo lo antes posible. Minimizar la exposición a la radiación, conocer tu historial familiar y realizarte autoexámenes son algunas de las medidas de prevención. Te decimos el resto.
El cáncer de tiroides es el quinto más común entre las mujeres. Desde los años 70, su incidencia se ha duplicado; sin embargo, la buena noticia es que, la tasa de supervivencia a 5 años para las personas con cáncer de tiroides es del 98%, y a largo plazo es del 95% o más, ya que actualmente, el cáncer de tiroides se puede detectar gracias a tecnologías como el ultrasonido, la tomografía computarizada y la resonancia magnética.
Ya sea prevenirlo o evitar retrasar su diagnóstico, estas cinco acciones podrían salvarte la vida:
La exposición a la radiación es uno de los dos principales factores de riesgo para el cáncer de tiroides. ¿Por qué? Porque grandes cantidades de radiación en la cabeza, el cuello o el pecho, generalmente por tratamientos para otros tipos de cáncer como el linfoma o el cáncer de mama, aumentan el riesgo.
Por esta razón, es importante que si recibiste alguno de estos tipos de radiación, acudas con tu médico oncólogo para seguimiento y vigilancia. Algunas personas también están expuestas a la radiación en su trabajo, como los técnicos de rayos X o de fluoroscopía.
La genética juega un papel importante en el cáncer de tiroides. Si tienes un familiar cercano (padre, madre, hermano, hijo) con cáncer de tiroides, tu riesgo es mayor. En particular, el cáncer de tiroides papilar es más común y tener un familiar directo con esta enfermedad aumenta tu riesgo.
Algunas condiciones genéticas como la Poliposis Adenomatosa Familiar (PAF), los síndromes MEN2 y el Síndrome de Cowden también pueden aumentar el riesgo de cáncer de tiroides. Si tienes familiares con estas condiciones, es necesario que te hagas un examen de tiroides, como una ecografía, y consideres el asesoramiento genético.
Hacerte autoexámenes del cuello puede ayudarte a detectar el cáncer de tiroides a tiempo, igual que con el cáncer de mama o testicular. La tiroides está en el centro del cuello, justo encima de la clavícula. Puedes sentir bultos o tumores en la tiroides, o ganglios linfáticos agrandados a los lados del cuello.
Te decimos como hacerte un autoexamen de prevención de cáncer de tiroides:
Una ecografía de tiroides es esencial para detectar y diagnosticar el cáncer de tiroides. Es una prueba rápida y efectiva que puede identificar características específicas de los cánceres de tiroides.
Asegúrate de que la ecografía sea completa y que incluya tanto la tiroides como los ganglios linfáticos en ambos lados del cuello, ya que estos también pueden verse afectados. La ecografía siempre debe ser el primer paso antes de considerar otras pruebas como la tomografía computarizada o la resonancia magnética.
Si tienes factores de riesgo o preocupaciones, una ecografía realizada por un experto es fundamental.
Mantener un estilo de vida saludable es clave para prevenir el cáncer de tiroides. Aquí algunos consejos:
Al final, la detección, prevención y el diagnóstico temprano del cáncer de tiroides son cruciales. Confía en los especialistas cuando se trate de la salud de tu tiroides y su detección.
Nuestro equipo de expertos en cáncer de tiroides del Centro Oncológico Internacional está aquí para ayudarte y guiarte en cada paso del proceso de detección y prevención. Contamos con la mejor atención médica y podemos ayudarte a prevenir y a tratar un padecimiento ya diagnosticado.
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Fuentes:
800 8773 264![Prevención del Cáncer de Tiroides [5 acciones que puedes tomar]](https://14535404.fs1.hubspotusercontent-na1.net/hubfs/14535404/Prevencion-del-Cancer-de-Tiroides.jpeg)