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Prevencion Septiembre 16, 2024

¿Cómo se puede prevenir el cáncer cervicouterino?

¿Cómo se puede prevenir el cáncer cervicouterino?

Hay dos cosas que puedes considerar para prevenir el cáncer cervicouterino: Vacunarte contra el VPH y realizarte pruebas regularmente. Esto de acuerdo con la Sociedad Americana del Cáncer (ACS, por sus siglas en inglés American Cancer Society). Además, mantener un diálogo abierto con tu médico también será necesario para estar al tanto de las recomendaciones específicas según tu edad, historial médico y factores de riesgo individuales.

 

💚 Lo primero que debes saber…

El cáncer de cuello uterino suele comenzar con cambios en las células, que, con el tiempo, pueden convertirse en lesiones cancerosas. Pero no te preocupes, existen formas de detener este proceso antes de que avance.

Hay dos maneras clave para prevenir el cáncer de cuello uterino:

  1. Detectar y tratar a tiempo las lesiones en el cuello uterino; es decir, los cambios celulares que eventualmente podrían convertirse en cáncer.

  2. Prevenir que estas lesiones aparezcan desde el principio.

La mejor manera de lograrlo es acudiendo a revisiones periódicas con médicos especializados en ginecología, oncología ginecológica y cirugía oncológica. Ellos te realizarán las pruebas necesarias para detectar cualquier lesión que pudiera aumentar tu riesgo de desarrollar un tumor maligno.

Pruebas para la detección del cáncer cervicouterino

Una manera importante de cuidar tu salud es a través de las pruebas de detección. Estas pruebas son como guardianes que buscan posibles problemas antes de que se conviertan en algo más serio.

Dos pruebas que son especialmente útiles para detectar el cáncer de cuello uterino son:

  1. El Papanicolaou

  2. La prueba de Virus del Papiloma Humano (VPH)

Ambas son simples, rápidas y, dependiendo de tu caso particular, es posible que se te realice una o ambas.

Consisten en que un profesional de la salud, con ayuda de un instrumento especial, recoja células del cuello uterino y estas se examinen en el laboratorio en busca de cualquier señal de riesgo. 

La prueba de VPH es especialmente importante porque puede detectar ciertos tipos de virus que pueden llevar al desarrollo de lesiones de riesgo y cánceres cervicales.

💚 Recuerda que los resultados de estas pruebas son una parte crucial para evaluar tu riesgo de desarrollar cáncer cervicouterino. Si los resultados son positivos, no te preocupes. Esto simplemente significa que se necesitarán algunas pruebas adicionales para entender mejor tu situación y tomar las medidas adecuadas.

Formas de prevenir un cáncer cervicouterino

  1. Aplicar vacuna contra el VPH en niñas y adultos jóvenes
  2. Limitar la exposición al VPH
  3. Usar un condón
  4. No fumar

 

1. Aplicar vacuna contra el VPH en niñas y adultos jóvenes

Una de las acciones más efectivas para protegerte es con la vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH). Estas vacunas son como pequeños escudos que, con una eficacia cercana al 100%, ayudan a prevenir la infección por ciertos tipos de VPH que pueden causar cáncer cervicouterino. Además, protegen contra algunos tipos de verrugas.

Considera que estas vacunas funcionan mejor antes de estar expuesta al virus, por lo que es ideal recibir la vacuna antes de comenzar actividad sexual.

Las vacunas contra el VPH son seguras y eficaces, y los efectos secundarios suelen ser mínimos. Puede que experimentes un poco de enrojecimiento o hinchazón en el lugar de la inyección, pero estos síntomas suelen desaparecer rápidamente.

💚 Recuerda que además de protegerte contra el cáncer de cuello uterino, estas vacunas ayudan a prevenir otros tipos de cáncer relacionados con el VPH, como verrugas genitales.

Las niñas entre 9 y 12 años, así como los jóvenes de 13 a 26 años que no han sido vacunados o no han completado todas sus dosis, deberían recibir la vacuna lo antes posible.

Es importante mencionar que los adultos jóvenes sexualmente activos también pueden beneficiarse de la vacuna, aunque quizás en menor medida, ya que es posible que hayan estado expuestos a uno o más tipos de VPH contra los que protegen las vacunas.

Las vacunas ofrecen protección contra la mayoría de los genotipos de VPH que pueden causar cáncer de cuello uterino. Sin embargo, es fundamental seguir realizando pruebas de detección de este cáncer. También ten en cuenta que estas vacunas no previenen otras enfermedades de transmisión sexual (ETS).

 

2. Limitar la exposición al VPH

El VPH se transmite de piel a piel, lo que significa que el contacto directo con una parte infectada del cuerpo puede propagar el virus. Aunque el contacto sexual es una forma común de transmisión, no es la única.

El VPH incluso puede transmitirse sin tener relaciones sexuales, lo que significa que, por ejemplo, un simple contacto mano-genital también puede ser un riesgo. Lo que es aún más complicado es que una infección por VPH puede moverse de una parte del cuerpo a otra; es decir, puede comenzar en el cuello uterino y extenderse a la vagina y la vulva.

Limitar el número de parejas sexuales y evitar tener relaciones con personas que han tenido muchas parejas puede ayudar a reducir la exposición al VPH. Sin embargo, incluso una sola pareja puede representar un riesgo, ya que el VPH es bastante común.

 

3. Usar un condón

Los condones son una herramienta importante para mantenerte segura y saludable. Si bien es cierto que proporcionan cierta protección contra el VPH, debes tener en cuenta que no previenen completamente la infección.

¿Por qué? Bueno, los condones no cubren todas las áreas del cuerpo que pueden estar infectadas por el VPH, como la piel alrededor de los genitales y el área anal. Eso no significa que no sean útiles; de hecho, los condones son una parte importante de practicar sexo seguro y también ayudan a proteger contra el VIH y otras ETS.

 

4. No fumar

No fumar es otra forma de reducir el riesgo de lesiones premalignas y cánceres cervicales. Fumar tabaco no solo aumenta el riesgo de desarrollar cáncer de pulmón, sino que también se ha relacionado con un mayor riesgo de cáncer cervicouterino.

El humo del tabaco contiene sustancias químicas que pueden dañar el ADN de las células del cuello uterino, aumentando así la probabilidad de que se desarrollen células anormales y cáncer. Por lo tanto, dejar de fumar beneficia tu salud pulmonar y contribuye a reducir el riesgo de cáncer cervical y otros problemas de salud

💚 Finalmente, si tienes antecedentes familiares de cáncer cervicouterino, habla con tu médico acerca de empezar las pruebas de detección a una edad más temprana, tómate el tiempo para acudir a citas y chequeos de rutina con tu ginecólogo y mantente informada.

Recuerda que en el Centro Oncológico Internacional estamos para ayudarte. Contamos con la mejor atención médica y podemos ayudarte a prevenir y a tratar un padecimiento ya diagnosticado. Somos una institución dedicada a la investigación y a brindar tratamientos para el cáncer en México con más de 10 años de experiencia dedicándonos al cuidado de la salud.

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 Fuente:
American Cancer Society
OMS/OPS Organización Mundial de la Salud/Organización Panamericana de la Salud

 

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