De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (ONU), cada año mueren en el mundo alrededor de 10 millones de personas a causa de cáncer y lamentablemente, una de las principales causas de estas muertes es la detección tardía de la enfermedad.
Ya sea por prevención, por haber presentado síntomas sospechosos o por tener carga genética, la realización de exámenes para la detección oportuna de cáncer salva vidas y reduce los costos de tratamiento.
De acuerdo con un artículo publicado por la ONU, diagnosticar cualquier tipo de cáncer durante una etapa avanzada puede llevar al paciente a sufrir innecesariamente y, en el peor de los casos, a una muerte temprana.
Afortunadamente, gracias a nuevas y oportunas medidas de prevención, se ha mejorado el diagnóstico oportuno de la enfermedad, garantizando así un tratamiento rápido y eficaz.
¿Cómo son los estudios para la detección oportuna del cáncer?
- Estudio para la detección del cáncer de mama
De acuerdo con la American Cancer Society, se pueden realizar diferentes pruebas para la detección del cáncer de mama; sin embargo, la más común es la mastografía.
Esta prueba se hace con ayuda de una máquina diseñada específicamente para examinar el tejido de los senos; toma radiografías a dosis más bajas que las radiografías habituales y debido a que sus rayos X no pasan por los tejidos de forma fácil, la máquina se apoya de dos placas que comprimen el seno para separar el tejido.
Gracias a la función de esta máquina, se obtienen imágenes de mejor calidad y es posible el uso de menor radiación.
- Estudio para la detección del cáncer colorrectal
Este tipo de cáncer suele ser detectado a través de una colonoscopia, un procedimiento con el cual se puede observar el interior del recto y del colon para así determinar si hay pólipos, zonas anormales o cáncer.
Durante la prueba, se introduce un colonoscopio -un instrumento delgado con forma de tubo, que lleva una luz y una lente para observar- en el recto hasta el colon. En ocasiones, este instrumento es más avanzado y permite la extracción de tejido que, más tarde, puede ser observado en microscopio para determinar si hay o no presencia de células cancerosas.
- Estudio para la detección del cáncer de testículo
El primer estudio que se realiza cuando hay sospecha de cáncer testicular es una ecografía, también conocida como ultrasonido o sonografía. El estudio se hace a base de ondas sonoras que producen imágenes del interior del cuerpo.
El estudio también se hace para saber si ha habido algún cambio en una afección benigna, como el hidrocele o el varicocele. Si la prueba llega a detectar una protuberancia o masa sólida, es probable que sea cáncer y, en este caso, el especialista recomendará otras pruebas o, de ser necesario, una cirugía para remover el testículo.
- Estudio para la detección de cáncer de ovario
Este tipo de cáncer puede ser detectado durante un examen pélvico de rutina. En este estudio, el médico palpa los ovarios y el útero para poder conocer la consistencia, la forma y ver si el tamaño es normal; sin embargo, es casi imposible poder palpar tumores ováricos en sus etapas iniciales.
Las pruebas que, por lo regular, se usan para detectar el cáncer de ovario son la TVUS -ecografía transvaginal- y la prueba de sangre CA-125. La TVUS puede ayudar a encontrar un tumor en el ovario con ayuda de ondas sonoras que examinan el útero, las trompas de Falopio y los ovarios. Sin embargo, esta prueba no puede indicar con precisión si una masa es benigna o maligna.
La importancia de la prevención
Ya sea porque se tiene carga genética o porque se han presentado síntomas sospechosos, la prevención puede salvar vidas. En COI contamos con la Clínica de Check Ups oncológicos y con la Clínica de asesoramiento genético y cáncer hereditario, como principales medidas de prevención. Acércate a nosotros y pregunta por nuestros servicios del más alto nivel.